(La Duendes
editora, Comodoro Rivadavia, 2016, 110 páginas)
Nota: las imágenes son muestras de las páginas del libro
Este
libro está integrado por una compilación de trabajos de Alfredo Grondona White
(Rosario, 1938 – Buenos Aires, 2015) publicados en las revistas Humor, Súperhumor, El Péndulo, Humi y Berp (Uruguay). Junto con Andrés Cascioli y Tomás Sanz fue el fundador
de Humor Registrado –de la cual creó
su logotipo –.
El
libro se inicia con un emotivo prólogo de Alejandro Aguado –que además coloreó
las tapas – y una entrevista subida al blog
de La Duendes en febrero de 2010. También hay
homenajes de sus colegas de Humor
(Meiji, Lar, Tomás Sanz, Julio Parissi, Tabaré, Jorge Barale y Daniel Pancú) y
de El Toto, Fer Calvi y Diego Parés. Se debe destacar el aporte que prestó la Licenciada en Artes
(UBA) Natividad Marón para el capítulo «El detrás de escena», en el cual se
muestra el esforzado trabajo previo que emprendió el maestro (no le gustaba que
lo llamaran así) en su obra.
La
temática de Grondona White es el costumbrismo, la vida cotidiana –su capacidad
de observación es digna de un entomólogo –, como la gente que arroja papeles en
la calle, boletos de colectivo, prospectos, cajitas y demás objetos («La calle
está sucia»). Sus viñetas están siempre acompañadas de textos explicativos
(algunos funcionan como refranes), es decir el chiste está dado por la
conjunción de éstos con los dibujos, en los que importa la línea siempre
sencilla – como si tomara espontáneamente
apuntes –, y a la vez ocurrente y graciosa.
Su
humorismo destila ingenuidad, pero ésta puede ser aprovechada para entender la
década de los ochenta y ver que algunas situaciones –más allá de los cambios tecnológicos y de
costumbres – se siguen repitiendo. Demuestra poseer una impresionante
experiencia sobre la sabiduría popular al abordar hobbies como el aeromodelismo, la filatelia, los cursos por
correspondencia y la vida matrimonial («Los metejones archivados»).
Las
secuencias de historietas son cortas: rara vez pasan de una o dos páginas. A
veces utiliza lo que él llama contraataques («Las madres quejonas», «Los viejos
babosos»), en los cuales un primer cuadrito presenta una provocación de un
personaje y el segundo la correspondiente respuesta del agredido. Lo valioso es
que el primer cuadrito es por sí mismo un logrado chiste.
Los bespi (o sea pibes al revés) es una historieta protagonizada por chicos que salió
en las revistas Humi y Súperhumor.
Registra el costado risueño y disparatado de los juegos que ellos inventan
burlándose de la realidad. Detrás de este enfoque humorístico se vislumbran los
sinsabores que padecen los padres y la evocación de la frase “no es fácil criar
hijos”.
Alfredo Grondona White es un libro imprescindible para todo entusiasta del humor gráfico.
Germán Cáceres