(La Duendes
editora, Comodoro Rivadavia, 2013, 82 páginas)
Esta
historieta se publicó originalmente en 1986 en la revista Fierro, primera época.
El
relato transcurre entre el otoño de 1930 y mayo de 1931. Enrique Navarro
(Navarrito) es un cronista de la sección Policiales del diario Crítica, en cuya Redacción aparece el gran
Roberto Arlt frente a su máquina de escribir.
AlbertoDose exhibe su capacidad artística ilustrando el Buenos Aires de esos años con
viñetas de exquisita belleza no exentas de un aire decorativo. A veces
predomina el blanco con dibujos a pura línea, y otras, el negro pleno que se
distribuye en vestimentas, edificios y automóviles. Su grafismo es tan
estilizado que posee un sesgo humorístico y clásico a la vez, que lo emparientan
tanto con Roy Crane como con Milton
Caniff y Harold Foster (o Sanyú, según la apreciación de Andrés Valenzuela en Página/12). El artista se documentó a
fondo sobre el aspecto de la ciudad en esa época (se ven afiches de Gardel y de
Chaplin), que a la distancia al lector le resultará encantador y pintoresco,
pero, sin embargo, entonces reinaba la absoluta exclusión social, la
expoliación de prostitutas en infames prostíbulos y el golpe militar del 6/9/30
que derrocó a Yrigoyen e instaló una brutal represión. En el prólogo, el
guionista Eduardo Mazzitelli opinó que “Todo para que el dibujo de Dose (el
estilo de Dose) demuestre que no solamente es estético y descriptivo, sino
también funcional al relato”. Este dibujante, que reside en Estados Unidos,
declaró en la entrevista que forma parte del libro y le realizó Alejandro
Aguado “que la historieta es lo único que hago todavía en papel, al menos el
lápiz, luego todo lo demás en la
Cintiq ” (es una tableta de arte digital). Antes había explicado
que “No era para mí difícil cambiar de estilo, en realidad, es el tema lo que
me sugiere el estilo”.
Por
su parte, Ricardo Barreiro (1949-1999) –uno de los mejores guionistas que tuvo el
país- no deja de asombrar con su inventiva para dotar de giros a la trama. Sus
diálogos son contundentes, utiliza el racconto para darle dinamismo a la
historia y desliza reflexiones constantemente (“La necesidad de creer está por
encima de cualquier desconfianza”/ “De algunas circunstancias podemos extraer
como enseñanza cuán dominante resulta ser todavía la animalidad en nuestra
especie”). Además, como es su costumbre, fustiga a los poderosos, a la institución
de la iglesia católica y a los militares.
Los
diálogos van en cursiva y los textos explicativos en letra de imprenta porque
pertenecen a la máquina de escribir que aparece en la parte inferior del
cuadrito, ya que es la bella doctora Ema Kazinsky la que escribe este relato
que titula “El caso de Rodolfo A.”, un asesino serial al que Navarrito persigue
(“Al menos Ricardo rinde homenaje a los viejos clásicos de la novela negra”,
observa Mazzitelli), ayudado por la médica que es portadora de una sexualidad
desbordante, tan presente en la obra de Barreiro.
La reedición de Navarrito permite acceder a uno de los logros más importantes del
género en la Argentina.
Germán Cáceres
4 comentarios:
Germán me gusta la nota y los dibujos¡Muy buenos!!! Martha
Honor al gran Alberto Dose !!!!...Un dibujante de los que ya no vienen !!!..Y también realizó historietas con guiones propios, un genio !!!
Muy buena la nota y me parece excelente que se re-editen las joyas del comic nacional.
Que lindo que dibuja mi tio!
Tiene el toque
Me alegró la calidad con la que editaron este clásico. Muy buenas las notas y la entrevista.
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