Un poco más de un año y medio atrás, Massaroli fue entrevistado para La Duendes y posteriormente se incorporó a Historieta Patagónica con su serie Juan Moreira. Luego le continuó el libro dedicado a la serie a través del sello de La Duendes y la publicación del personaje Orquideo Maidana, en Historieta Patagónica.
Se podría decir que en el poco tiempo transcurrido, mucha agua ha corrido bajo el puente y esta nueva entrevista al autor viene a actualizar la realizada en 2009.
Imágenes de la presentación del libro Juan Moreira en la Biblioteca Nacional
Cuando te sumaste a Historieta Patagónica en noviembre de 2009 con Juan Moreira, aún no estabas muy compenetrado con Internet. ¿Cómo ves hoy a Internet para mostrar trabajos y el contacto con los lectores?
Es imprescindible, desde que ya la gran mayoría de los que transitamos el mundo de la historieta estamos adentro. En mi caso, vengo de un gran aislamiento profesional, motivado por quince años de trabajar para el exterior, casi sin ningún contacto con el ambiente local en el que me formé, excepto unos pocos buenos amigos de toda la vida. A partir de mi llegada a FaceBook, esto cambió rotundamente; volví a encontrar a viejos amigos perdidos hacía décadas y conocí mucha gente nueva, joven y positiva, entre ellos los que hacen La Duendes (sigue).Cuando empecé a llevar un blog personal, en enero del 2010, pude comprobar aún más el poder de internet: mi intención original era ir contando las aventuras del pasado, los maestros que conocí, los trabajos que realicé, etc. pero hasta ahora fue casi imposible, dada la necesidad de relatar lo que me pasa en el presente: De pronto empezaron a sucederse las invitaciones a importantes festivales así como también a presentar mi libro ¡¡Juan Moreira!! en distintas ciudades. ¡Y como las dos cosas me gustan: viajar y contar...!
Imágenes de la presentación en la Biblioteca Nacional
Juan Moreira se republicó en Historieta Patagónica y luego vino el libro en papel. ¿Cómo describirías hoy la experiencia tras cinco presentaciones del libro en varias localidades?
Es maravilloso. Los originales de Moreira dormían apaciblemente en una carpeta desde 1984; a partir de su republicación en Historieta Patagónica, el blog de La Duendes, el público conoció el trabajo, lo siguió semana a semana y empezó a reclamar el libro. Es un sueño del que todavía no me desperté y dada la demanda por conocerlo en nuevos lugares, como por ejemplo Concordia, Entre Ríos, dentro de poco, creo que voy a continuar llevándolo allá donde esté el lector, a la manera del viejo Circo Criollo, por bastante tiempo más, lo que me hace muy feliz, ya que es una obra que quiero muchísimo y veo que la historia del gaucho perseguido despierta mucho interés en todas partes, incluso en Chile, para mi propio asombro, ya que allá no se conoce su leyenda.
Páginas de Juan Moreira, realizadas por Massaroli
La primera presentación del libro Juan Moreira fue en la Biblioteca Nacional, con gran concurrencia de público y colegas, entre ellos varios de los grandes nombres de la historieta nacional. ¿Cómo fue la experiencia?
¡Tenerlo en primera fila a Francisco Solano López, el creador del Eternauta, imagináte! A su lado, un compañero de andanzas en los tiempos de la Asociación de Dibujantes y Caras y Caretas y hoy célebre humorista devenido en plástico brillante: Miguel Rep; más allá, Cacho Mandrafina, un gran baluarte de nuestra historieta, y Sergio Ibáñez, y mis amigos de toda la vida Frank Szilagyi, Ramón Gil, Gaspar González, Natalio Zirulnik, Peni, Cativa, seguro que me olvido de algunos, disculpen... el escritor Germán Cáceres... conocidos periodistas como Hernán Brienza, Andrés Valenzuela y Felipe Ávila compartiendo la charla conmigo... los viejos compañeros de estudios en el IDA y los nuevos amigos de La Duendes, como Keki, Aballay, Scherpa, el entrañable Ariel Avilez, que me escribió un muy buen prólogo... y tantos otros colegas y amigos que llenaban la sala; en fin, una noche singular, única, irrepetible: ¡el sueño del pibe!
Pero creo que Moreira se lo merecía. No digamos por mi trabajo, sino porque es un mito argentino que me enorgullezco en rescatar y difundir; creo que necesitamos nuestros propios mitos: ¡Más Moreiras y menos Rambos!
Orquideo Maidana, de Massaroli, versión color 2011, en Historieta Patagónica.
A Moreira le continuó Orquideo Maidana en Historieta Patagónica, al cual volviste a dibujar luego de muchos años, continuando el guión original. Qué se siente al volverlo a la vida para los lectores?
Muchas cosas. Como me sucede siempre que emprendo la aventura de una nueva historieta, no veo claro a dónde voy o qué va a salir; es decir, voy haciendo camino al andar y eso es lo que le da emoción al hacer historietas. En este caso mucho más, porque estoy dibujando los guiones que me habían quedado sin dibujar cuando cerró el diario La Voz en 1985. Esto me ayuda mucho, porque me permite centrarme en el dibujo y dejar para más adelante el pensar para dónde voy a agarrar cuando se terminen. No sólo vuelve Orquídeo a la vida: vuelven sus compañeros: Borges, Gardel, María la Lejana, Nicolás el Punk... Lo que te puedo asegurar es que es una alegría inmensa, porque se trata de mi personaje más querido y siempre quise volver a dibujarlo.
La presentación de Juan Moreira en Tigre
Pasados dos años de la entrevista y en vista que hoy publicás tanto en el exterior como en el país ¿cómo ves el panorama actual de la historieta, en el país y el exterior?
A mi me parece que se ha perdido un sabor fundamental: el que tenía la historieta de los '60s, cuando se olía la tinta fresca en los Rayo Rojo o Misterix recién llegados al quiosco donde uno estaba esperándolos. La historieta bien contada, que se entendía, donde había aventura, alegría de vivir y de dibujar. Hay una cantidad impresionante de gente que dibuja y escribe historietas; eso es bueno; pero me parece que esos mismos autores son los que compran los libros o las pocas revistas que salen. Es decir: no hay llegada al público masivo y todo queda en una especie de casta o elite, la de los comics norteamericanos, la del manga, la de los europeos... Muchos de los nuevos dibujantes salen tratando de adaptarse al gusto foráneo y a la computadora, cuando harían bien en ver en su interior qué tiene cada uno para dar y mirar la vida real a su alrededor; en eso los humoristas tienen mucho más contacto con nuestra realidad, sin duda. En mi caso, no me convence el photoshop; prefiero toda la vida el blanco y negro o, en último caso, el color pintado a mano, chupando el pincel para formarle la punta, como hacía Pablo Pereyra, mi maestro.
Páginas de Juan Moreira.
A pesar de trabajar desde hace largo tiempo para el exterior, he llegado a una etapa de mi vida profesionael en que siento la profunda necesidad de volver a mis fuentes, a una historieta que hable de nosotros, no sólo de los argentinos sino de Latinoamérica en conjunto, como he visto muy buenos ejemplos en Chile, o el Clan Nahualli, de Colombia. Las creaciones de Fer Gris y Bernoy en La Duendes, el Aquí Mismo, de Aquelarre o 1806 y 1807 de los tucumanos de Dibutopía, nos muesgtran que si se quiere se puede. Contar historias que nos ayuden a ser auténticos y no meras copias de otras culturas. Si el tango triunfa en el exterior por ser bien argentino, ¿por qué nuestra historieta no debería hacer o mismo.
Algunos ejemplos de la repercusión del libro Juan Moreira en la prensa: Nota a página completa en el diario El Chubut, en Cuadritos y Culturacomic (México)
Massaroli acaba de inaugurar un hermoso blog, “100 historietas”cuya presentación la dejamos en sus propias palabras:
"Hay historietas que me han acompañado toda la vida. Viejas, amarillentas y gastadas, algunas a punto de desintegrarse, siguen estando ahí, en un rincón de mi estudio, atesoradas más allá del olvido. Yaciendo ignoradas a veces por años, cada tanto, en el momento menos pensado, me las encuentro y no puedo evitar dejar todo y quedarme mirándolas, leyéndolas de nuevo, descubriéndolas por enésima vez, comprendiendo que son ya parte de mí; para siempre.
Por eso, hoy que gracias a la técnica se puede, quiero compartirlas con ustedes, amigos que transitan el espacio virtual y que traídos por el azar, la curiosidad o el afecto, aterrizan en este lugar. Un lugar dedicado, a partir de ahora, a aquellas historietas que, para mí, son sin duda, IMBORRABLES.
José Massaroli"
Para leer online la serie Juan Moreira en Historieta Patagónica
Para seguir al personaje Orquideo Maidana en Historieta Patagónica
Para leer la entrevista a José Massaroli realizada en 2009:
Primera parte
Segunda parte
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